“Las personas que realizan ejercicio de resistencia tienden a superar aspectos del envejecimiento típico, logrando un envejecimiento saludable”, aseveró Mariana Arantxa Durán Chávez, responsable del área de Fisioterapia de la Comisión Estatal de Cultura Física y Deporte (Cecufid).
En continuidad con las recomendaciones de activación física y salud para las y los michoacanos en tiempos de contingencia sanitaria por el Covid-19, el Gobierno del Estado a través del Departamento de Medicina, Ciencias Aplicadas e Investigación Deportiva de la Cecufid, no dejan del lado al adulto mayor.
“En la vejez pueden existir una serie de datos clínicos indicativos de deterioro físico como la pérdida de masa ósea y de la masa muscular, así como alteraciones cardiorespiratorias e incluso cambios neurológicos y psiquiátricos, sin embargo, aunque estos cuadros clínicos son recurrentes en el adulto mayor, es importante no normalizarlos debido a que se es posible envejecer sano y siempre debe buscarse disminuir complicaciones de salud”, expuso Durán Chávez.
Es por lo anterior que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda 150 minutos de actividad física moderada en casa para el adulto mayor.
“Estamos hablando desde regar las plantas, subir y bajar escaleras, caminar dentro de casa y demás. En cuanto a ejercicio resistido son esas actividades que requieren carga de peso, y en cuanto a ejercicio aeróbico ahí sí pues sería el bailar, o a lo mejor a aquellos adultos mayores que pueden saltar la cuerda, aunque es importante que el ejercicio sea personalizado y progresivo, esto es, siempre contar con la asesoría ya sea de un especialista o entrenador certificado”, señaló.
Entre los múltiples beneficios de la actividad física en personas de la tercera edad se encuentra el aumento de la longevidad, la regulación de los ciclos del sueño y de la presión arterial, además de efectos positivos a nivel emocional.
De igual manera mejora de la funcionalidad, hay un incremento de la independencia y autonomía, teniendo mayor calidad de vida, así como la estimulación de la plasticidad cerebral.
Por último, mejora la fuerza muscular a través del aumento de la masa muscular, disminuyendo el riesgo de caídas, junto con el incremento de la densidad ósea, reduciendo el riesgo de fracturas. El ejercicio aérobico favorece a la disminución de tejido graso, disminuyendo así, los niveles de lípidos.
La responsable del área de Fisioterapia de Cecufid invitó a ponerse en contacto para más información respecto a este tema, al correo electrónico: cecufid.ft@gmail.com.